sábado, 16 de octubre de 2010

Nunca es suficiente...


" De eso tengo miedo. De no ser suficiente. No lo bastante buena, no lo bastante lista,
no lo bastante guapa." - Brooke Davis

A veces las barreras nos las imponemos nosotros mismos. A veces las barreras vienen impuestas por agentes externos. Eso da igual. Al fin y al cabo el resultado es el mismo: una lucha constante por mejorar, por sentirse medianamente importante y ver reconocido el esfuerzo.

Siempre he visto esta serie, desde el primer episodio. Muchas cosas me han impactado a lo largo de la misma, pero en esta ocasión, Brooke describió perfectamente un sentimiento que me ha acompañado a lo largo de toda mi vida. El sentimiento de que hagas lo que hagas, nunca será suficiente. Siempre tendrás que hacer un esfuerzo mayor para que se te reconozca. Si no lo consigues, pasarás desapercibida.

Puede que, en la búsqueda de dicho reconocimiento, terminemos por llamar la atención de la forma equivocada y la gente se haga una idea errónea de nosotros mismos. Pero es parte del guión, siempre pasa.

Siempre habrá alguien mejor que tú en todo, pero cuando no te gusta perder, cuando todo lo que quieres es alcanzar lo que anhelas, y nadie repara en tu presencia, en tu esfuerzo, en tus sueños…, parece que nada merezca la pena. Es la sensación que tienes de estar por detrás de alguien siempre, lo cual no es malo, significa que puedes tener margen de mejora. El problema viene cuando no tienes ni una sola oportunidad para lucirte, cuando lo intentas, lo intentas más fuerte la siguiente vez, y la próxima, y parece que todo queda reducido a nada.

Impotencia. Ese es el sentimiento estrella. Finalmente alguien llega, te intenta abrir los ojos como muchas otras personas lo han intentado antes de forma fallida. La lucha da frutos, valorar tu propio esfuerzo en el camino es lo que tienes que aprender a hacer. ¡Qué fácil resulta decirlo! Pero el miedo está ahí, esperándote en la puerta, acompañándote cada día dispuesto a hacerte sentir realmente mal por cada fallo que cometas, por cada error cometido, por cada logro no conseguido por ti. Ahí está, y por más que trates de correr y alejarte de él, siempre es más rápido, te alcanza y te supera.

Es imposible. Por más que lo intentes, de momento no será suficiente. Quizás algún día, pero hasta que ese día llegue seguirás tratando de hacerte notar de la forma equivocada, seguirás luchando, seguirás teniendo miedo a fallar y seguirás buscando tu oportunidad de brillar, de hacer que merezca la pena.

9 comentarios:

  1. Podría ponerte mil y un ejemplos de por qué no debes sentirte impotente. ¿No es verdad que cada día avanzas? ¿Y acaso no te has sentido nunca orgullosa de algo que habías hecho?

    Supongo que el reconocimiento externo siempre es importante, aunque no tanto como podemos llegar a creernos. Si algo me ha salvado durante muchos años ha sido el saber que estaba haciendo las cosas lo mejor que podía. No me gusta arrepentirme, por lo que cada día doy el máximo y no me guardo nada. ¿Para qué? Al fin y al cabo, una cosa muy importante que debemos tener en cuenta es que, para querer a otra persona, primero debemos querernos nosotros mismos porque sino nos consumimos poco a poco.

    No dejes de sonreír ni un sólo segundo, porque ¿sabes qué? Cada cosa que hagas es un triunfo. Cada sonrisa que te muestren será porque has hecho feliz a alguien por un momento y no hay mejor recompensa que esa.

    Sólo te diré una cosa más. A mí me has hecho sonreír, y no tan sólo un momento...

    Mil besos de un admirador

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Impotencia..¿Por que tiene que existir? :)

    Te sigo!

    +1Beso en el aire .


    Pasate si quieres:

    (http://yenmilocuraencontrelalibertad.blogspot.com/)

    ResponderEliminar
  4. He leído un par de cosillas de tu blog y la verdad es que me gusta mucho.
    Sobre tu entrada, la impotencia es uno de los peores sentimientos, pero a veces, es necesaria para poder avanzar.
    Así que ya tienes un seguidora más. ¡Pásate por el mío!
    Un beso :)

    ResponderEliminar
  5. Yo vi la 1era temporada esta serie luego dejo de gustarme nose porqe :|
    un besito:)

    ResponderEliminar
  6. El peor enemigo, es siempre uno mismo. Te limitas, te autocompadeces...

    Sonríe coño, nadie lo hará por ti.

    ResponderEliminar
  7. He encontrado tu blog por el tuenti en una página de blogs y tal, y ... puf en cuanto he visto a Brooke ya tuve que ponerme a leer, me encanta One tree hill. Es una serie que me ha enseñado muchísimo.
    Aparte de eso me gusta mucho como escribes, me siento identificada con el texto, sobre todo con la parte en la que dices que todo se reduce a nada por mucho que lo intentes. Eso a veces pasa, pero bueno. En una peli dicen: Que el miedo a fallar no te impida jugar. Hay que aplicarlo. Es arriesgar a todo o nada, mejor ser feliz, no?

    ResponderEliminar
  8. miedo. creo que es el único enemigo de tus sueños.
    Más que impotencia, la impotencia la puedes dejar atrás, pero el miedo? cómo dejas atrás el miedo.
    (: me encantó. suerte

    ResponderEliminar
  9. Brooke Davis me encanta!!! y esa frase es preciosa.
    La impotencia y el miedo es lo peor; el miedo es lo que no permite que avancemos y la impotencia es un poco de lo mismo.

    Me encanta tu blog y lo que estoy leyendo en él. Es fantástico.
    Te felicito, ya tienes nueva seguidora

    ResponderEliminar